Como todos los hombres tenemos que afeitarnos, y eso a veces es un sufrimiento, dependiendo de la maquinilla que utilicemos.
Las máquinas eléctricas están muy bien pero todos sabemos que su afeitado no es como el de una maquinilla de hojas, sino que se lo pregunten a nuestra pareja, cuando se quejan de que “rascamos”.
A lo largo de nuestra vida hemos pasado mucho tiempo mirando y buscando para comprar nuestras maquinillas, pero casi siempre, compramos a ciegas y nos preguntamos si apurará, si rascará, me cortaré, bueno ya sabéis a que nos referimos.
Por este motivo queremos hacer una amplia comparación, probando y analizando al pormenor todos los modelos disponibles del mercado y dar nuestra opinión.
Queremos dejar claro que es nuestra opinión personal, ya que ni todas las pieles, ni la dureza del pelo de la barba de todos son iguales.
En la sección "maquinillas . . . ", podéis ver como las analizamos y probamos a fondo, con fotos, detalles y explicaciones.
Nos centraremos en la relación de calidad-precio, ya que estos tiempos de crisis, no están para tirar los euros por el lavabo todos los días a la hora de afeitarnos.
De este modo incluimos una sección; "puntuación/coste diario", en la que damos un valor en puntos en una escala del 1 al 10, y os decimos el coste real diario de cada maquinilla.
La gran duda: recargable o desechable
Sin duda, nosotros somos defensores absolutos de las recargables.
Las recargables son de metal, cromadas, doradas, de color, da igual, lo importante es que son más pesadas, suelen pesar sobre los 40 gr. y las desechables de plástico pesan sobre los 9 gr.
Al tener más peso en la mano tenemos un mayor control de la maquinilla, y por lo tanto de la presión que ejercemos al dar una pasada.
Con este control será más fácil evitar los odiosos cortes, causados la mayoría de las veces por ejercer demasiada presión sobre nuestra piel.
Otro aspecto de las recargables, es que suelen tener mejores acabados, los mangos están engomados por la parte superior e inferior, y su ergonomía está más estudiada, para que sea cómoda en la mano y no resbale.
Si eres de los que piensan que las recargables son más económicas o simplemente te gusta cambiar más a menudo el cabezal, e su caso la maquinilla, un consejo: utiliza siempre el mismo modelo!
Esperamos que os sea de ayuda a la hora de decidir con que material afeitaros.